El concepto de pueblo originario hace referencia a los ascendientes de comunidades actuales, grupos o culturas que habitaron por varios siglos un territorio determinado, con lo cual generaron diversas formas de relacionarse entre ellos, con la naturaleza y con lo que identificaron como sagrado. Hoy día, se puede valorar y comprender a estas comunidades a partir del conocimiento sobre sus sistemas de organización de la vida social, de las tradiciones, los saberes y las formas de producir bienes que, en algunos casos, se conservan o se adecuaron a la actualidad.
En Asia, África y América se han encontrado legados y aportes significativos para la vida en comunidad de los pueblos originarios. En algunos casos, dejaron de existir como organización cultural y social, pero han dejado legados para la humanidad. En otros casos, se transformaron y mezclaron con otras sociedades, lo que les permitió no desaparecer.
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